Película del director Michael Haneke, en la que describe por medio de una cruda, realista y excelente propuesta estética, los acontecimientos cotidianos de un "pueblito" rural en la Alemania anterior a la Primera Guerra Mundial. En el entorno agobiante por momentos se desarrollan diversas situaciones que trastocan la tranquilidad, aparente, de este lugar y la trama se desenvuelve lenta y precisa sobre y a través de los personajes.
Es un relato directo desde el punto de vista estético, violento por momentos, con fragmentos y piezas que permiten entrever la psiquis de los personajes... pero lo que permanece oculto, eso que no se dice abiertamente, una expresión en un rostro, gestos, es lo que realmente da a la obra una calidad extraordinaria además de una brillante fotografía.
Hay que verla...
"Mi principal objetivo era presentar a un grupo de niños a los que se inculcan valores considerados como absolutos y cómo los interiorizan. Si se considera un principio o un ideal como algo absoluto, sea político o religioso, se convierte en inhumano y lo lleva al terrorismo".
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